En sus 230 páginas, la publicación Las áreas protegidas de América Latina - situación actual y perspectivas para el futuro revela el patrimonio natural de nuestra región. La historia de los sistemas nacionales de áreas protegidas, un registro de la situación actual y el análisis de las perspectivas y desafíos que enfrentan éstas en el siglo XXI, ilustrados con mapas y fotografías, forman parte de su contenido.
“El desafío de editar un libro con información sobre los sistemas nacionales de áreas protegidas (SNAP) para 22 países del subcontinente latinoamericano resultó una tarea compleja —una complejidad que refleja la diversidad geográfica, étnica, cultural, política y socioeconómica de la región”, afirma Joerg Elbers, editor de la publicación.
La investigación de las áreas protegidas bajo jurisdicción nacional dio como resultado la existencia de 1949 áreas protegidas en América Latina; con una superficie terrestre protegida que llega a más de 211 millones de hectáreas; un 10,4% de la extensión terrestre de los 22 países. Mientras tanto, la superficie marina protegida alcanza casi 29 millones de hectáreas, que representa un 2,1%.
“Las áreas protegidas pueden cumplir un papel preponderante en la reorientación de nuestra civilización. Es ahí donde reside un repositorio importante no solo de biodiversidad, sino también de culturas diversas que conservan además de conocimientos valiosos sobre la naturaleza, paradigmas de vida alternos a lo que hoy día rige en el mundo”, afirma Joao de Queiroz, Director Regional de la UICN.
De su cuidado y conservación, somos responsables todos. No solo las poblaciones locales o los gobiernos, sino también de los habitantes de las ciudades. Estos espacios son clave para proteger la naturaleza y los servicios ambientales que necesitamos para mantener la vida en el planeta.
“De este modo, las actuaciones a desarrollar en la conservación de áreas protegidas deben enfocarse para que éstas cumplan y sigan criterios adaptados a la nueva situación, como centrar la relación entre conservación y desarrollo en el pago por servicios ambientales, avanzar en la conservación de las áreas protegidas marinas y de agua dulce, integrar a los pueblos indígenas en los procesos de decisión y planificación, fortalecer la capacitación de los guardaparques, y promover la vinculación entre los objetivos de conservación y desarrollo a través del ordenamiento territorial como herramienta básica de planificación”, afirma Rosa Aguilar Rivero, Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino de España.
Esta publicación presenta igualmente los logros y los retos a futuro. “Indudablemente hubo grandes avances en la gestión de las áreas protegidas en América Latina en los últimos 20 años. Y estos avances van mucho más allá del aumento en la proporción de superficie protegida. Existen buenas perspectivas para el futuro y también muchos desafíos. Cada capítulo país cuenta al final con una sección sobre estos puntos".
Link de descarga: http://data.iucn.org/dbtw-wpd/edocs/2011-019.pdf
Fuente: http://www.iucn.org